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Una luciérnaga redentora de los iluminados caídos
Su torso es su antorcha
Su sangre y su carne
los fuegos sagrados
Los vidrios retumban
Los árboles callan
Los perros se esconden
Se estremecen los pájaros
Se derriten las cáscaras
dejando los diamantes del ser
destellando sus luces de durazno
Y nadie parece notarlo
Un resplandor se desenrosca
desde las partículas que tejen el cielo
forman un entramado de dodecaedros danzantes
que giran alrededor de soles arcoirizados
Un fresco olor a menta, alcanfor, eucalipto y jerez
un cosquilleo de células arácnidas y eléctricas
trepan los vellos, los cabellos danzan erizados
Y nadie parece notarlo
Un dorado verdor que se torna violeta
Y un violeta que se torna negromorado
Todo un evento de ensueño
Un ensueño galáctico
que... no sé lo que escribo
ni sé de lo que hablo
Me he cansado - creo - finalmente, de fornicar
Fornicar por cierto me recuerda
fonéticamente
a formol y a fórmico
Ácido fórmico ¡Eah!
¡Hormigas!
¡Hormigas borrachas!
¡Hormigas borrachas que me pican
los pies descalsos!
¡Ah! ¡Yáha!
¿Será posible sintetizar un nuevo entéogeno
a base de hormigas?
Hormigas que hubiesen hipotéticamente comido
luciérnagas redentoras de Iluminados caídos
¡Dietilamida de ácido lucifefórmico 25!
O al menos un derivado
de los químicos de los sesos
de éstos bichos
¿Acaso nadie lo ha intentado?
Ahorita mismo me iré al hormiguero
a organizar un bienintensionado holocausto
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